TIEMPO DE VERANO, SIN CLASES PERO CON MUCHA ACTIVIDAD

Tras la finalización de los exámenes, la vida cotidiana en el seminario cambia totalmente. En estas últimas semanas los seminaristas han aprovechado el final de clases y exámenes para fortalecer la comunidad y conocer diferentes realidades de la Archidiócesis .

Al terminar los estudios, el Seminario Metropolitano se desplazó al Convento de la Visitación donde, junto con la Comunidad de las Salesas, celebramos la Eucaristía; también fue tiempo esa semana para realizar la revisión de curso que transcurrió junto con la comunidad de Onuva en la Puebla del Río, lugar donde también vimos de cerca la realidad de su servicio a la Iglesia. En la Eucaristía los candidatos al sacerdocio y al diaconado firmaron el subsignatus como paso previo a la ordenación.

La semana posterior a los exámenes concluyó con un retiro espiritual predicado por D. Francisco Román. El párroco de la Real Parroquia de Santa María Magdalena nos exhortó durante el retiro a acercarnos a la Santísima Trinidad.

La cuarta semana de mayo los seminaristas fueron enviados por el Seminario a diferentes Parroquias de la Archidiócesis, donde les fueron encomendadas tareas para conocer la realidad pastoral. Mientras tanto, el curso de propedéutico peregrinó hasta las plantas del Apóstol Santiago. La semana concluyó con la consagración episcopal de D. Teodoro León y de D. Ramón Valdivia; día de júbilo para nuestra comunidad junto a la Archidiócesis.

La primera semana de junio, nos pusimos manos a la obra, pintando diferentes zonas del edificio del Seminario; días que fueron también propensos para avivar el clima de comunidad.

Finalmente, los últimos días la Delegación de Migraciones ofreció a los seminaristas un curso formativo sobre la realidad de las personas migrantes contando con la presencia del Vicario Episcopal de Pastoral Social D. Salvador Diánez. Diferentes personas de Cáritas, HOAC y agentes de pastoral migrantes, así como personas migradas nos ilustraron con sus testimonios.

Con la celebración del Corpus Christi junto a nuestro Arzobispo, monseñor Saiz Meneses, los seminaristas han vuelto a sus comunidades de origen, donde son enviados a seguir viviendo, aunque a otro ritmo, la llamada al sacerdocio. Durante el tiempo estival vivirán diferentes experiencias; campamentos, vivencia con comunidades asistenciales, también otros van a zonas de misión, y Dios mediante, todos irán al encuentro con el Santo Padre en la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa 2023.

El tiempo estival es tiempo de descanso, os animamos a rezar unidos para que los jóvenes sepan descubrir, en este tiempo más sosegado, la llamada particular que Dios les hace.